Ayer el separatista cantautor Luís Llach ofreció su último concierto en Verges (Gerona) A él asistían 5000 personas,entre ellas gran número de políticos,actores,algunos deportistas como el pro-etarra Oleguer Presas etc.Como era de esperar el recital fue un continuo ataque a España y a sus símbolos y a sus partidos mayoritarios (PP y PSOE).
Entre una canción y otra,tanto público como el propio músico, se encargaban de «subir» la tensión nacionalista con todo tipo de comentarios.Desde saludos a los televidentes valencianos que en «tres días» se quedarían sin tv3 por «el anticatalanismo del PP»,pasando por situar al PP y al PSOE en el «españolismo más rancio y decimonónico».Denominó «cretinos» a Aznar,Bush y Blair y se definió como «nacionalista radical». En diversas ocasiones,entre canción y canción,el público lanzó gritos a favor de la independencia.
Hé aquí solamente algunas «perlas» de lo vivido ayer en Verges.Pero lo más llamativo fue el gran abucheo que el público dedicó a José Montilla.
Y es una bronca hasta cierto punto «curiosa» porqué lo cierto es que habiendo multitud de políticos del PSC el que se llevó la gran pitada fue Montilla. Lo fácil sería decir que le pitaban porqué es un presidente «españolista» que ha creado un estatut muy por debajo de las expectativas de los radicales que se encontraban en el recital….pero entonces…¿por qué la pitada no se la llevó también Pasqual Maragall?
Parece claro que la bronca no era por la actuación política de José Montilla sinó por sus orígenes. Al público no le gustó que hubiese alguien de Córdoba entre ellos. Estamos,pues,ante una prueba más del fascismo nazi y xenófobo del nacionalismo catalán.
Los 5000 de ayer en Verges son enemigos de todos nosotros,de todos los catalanes que nos sentimos y que somos españoles y que creemos en la democracia y en las libertades de nuestro estado y nuestra constitución.
Ahora la pregunta es,tras lo visto anoche,¿Pepe Montilla y el PSOE de que lado prefieren estar?…Del lado de la democracia española y de la constitución o del lado de los radicales fascistas separatistas.Parece que Montilla se queda con los segundos a pesar que le odian. Que los que le voten tomen nota.
Por cierto, TV3 emitió el concierto completo.
crónica de lavanguardia
Luís Llach